El índice de suicidios en todas las franjas de edad ha ido en aumento y las autolesiones se han multiplicado en los últimos años. Entre los adolescentes y jóvenes, la situación es más alarmante si cabe: el suicidio es la primera causa de muerte hasta los 29 años, y la cifra crece a cada año.
Es evidente que existe un problema que se está extendiendo como la gangrena. Muchas personas en general, y muchos jóvenes en particular, están perdiendo las ganas de vivir y creen que la muerte es la solución a su vacío.
Hay que hacer algo y hay que hacerlo ya. Por eso, el Proyecto Help está saliendo a las calles para concienciar al mundo de que la del suicidio es una puerta falsa y sin retorno; y que la solución no pasa por quitarse la vida, sino por quitar el dolor.
Este programa especial, formado por cientos de jóvenes voluntarios que superaron la depresión y que incluso sobrevivieron a uno o varios intentos, ha logrado alcanzar a miles de personas a través de sus labores de concienciación. En el último mes y en más de 30 ciudades españolas, cerca de 47.000 personas descubrieron que la ayuda estaba a su alcance por medio de cartas de ánimo que encontraban a su paso.
Los mensajes de agradecimiento se cuentan por decenas. Dayane (29) de Madrid o Jonathan (32) de Albacete, son solo algunos ejemplos. Ambos recibieron un mensaje positivo cuando más lo necesitaban y con la ayuda del Proyecto Help, recuperaron la alegría de vivir.
Todos los días, en todos los Centros de Ayuda Cristiano, el Proyecto Help está a la disposición de todos aquellos que está pasando por un momento difícil y desean quitar el dolor de su alma. También por WhatsApp: 91 539 26 18. 
