Las reuniones están enfocadas a ayudar a las personas desde un fundamento bíblico, pero siempre con un enfoque claro, actual y práctico. Los asistentes escuchan testimonios y experiencias personales, consejos y, sobre todo, reciben mucha fuerza para vencer los problemas. En ellas enseñamos a los presentes acerca del uso de la fe racional e inteligente,  excluyendo la religiosidad, lo cual no brindaría ningún beneficio.

“Así también la fe por sí misma, si no tiene obras, está muerta.” Santiago 2:17

Como resultado del ejercicio de esta fe práctica e inteligente, las personas obtienen los resultados y cambios deseados, como pueden ser la unión familiar, la liberación de las drogas, la curación de una enfermedad,  la prosperidad económica, etc.