El domingo 12 de octubre, el Santo Culto en Madrid se celebró como siempre, a pesar de los cortes de tráfico y las dificultades para desplazarse en la capital debido a la festividad por el Día de la Hispanidad.
Empezó con una Audiencia particular con Dios, derramando la propia alma, siguiendo el ejemplo bíblico de Ana, quien padecía una fuerte depresión porque vivía constantemente humillada y frustrada por no haber podido ser madre. Después de orar y entregarse en el Altar de Dios, su tristeza desapareció y poco después tuvo a su primer hijo. Esto fue lo que hicieron cientos de personas en todas las iglesias del Centro de Ayuda Cristiano en esta mañana de domingo.
“Esto es lo que necesitas escuchar”
Durante el mensaje, el obispo Joaquim relató la historia bíblica del paralítico que fue llevado ante Jesús por cuatro amigos llenos de fe. Ellos creían que Jesús lo sanaría, y no estaban equivocados.
Sin embargo, al principio sucedió algo que ni el paralítico ni sus amigos se esperaban. El Señor Jesús, en cuanto lo vio le dijo, “Anímate, hijo, tus pecados te son perdonados” (Mateo 9:2)
El hombre que estaba paralítico, probablemente se quedó de piedra. Lo que él quería oír era “levántate y anda”, pero Jesús sabía que la raíz de su sufrimiento estaba en su interior.
Jesús quería sanar el alma de aquel hombre, porque su vida estaba en aquel estado por culpa del pecado, ya que el pecado nos aleja de Dios y trae consecuencias. Entonces lo perdonó, para que pudiera acercarse a Dios. Cuando el alma del aquel hombre estaba sanada, Jesús pudo terminar Su obra y le dio la sanidad física.
La parálisis era lo de menos. Para Dios, hacer un milagro en nuestra vida es fácil, lo más difícil para Él es sanar nuestra alma, porque para eso tiene que haber un esfuerzo por nuestra parte de obedecer a Su Palabra, de hacer lo que Le agrada, como perdonar, no mentir o ser personas honestas.
“Si tu alma está sanada, prepárate, porque Dios hará cosas grandes en tu vida. Primero arregla tu vida con Dios, mira hacia tu interior y no te preocupes por lo físico. Dios quiere hacer de ti una persona feliz, y esa felicidad empieza con el Espíritu Santo habitando en ti”, concluía el obispo antes de orar por todos.
“Porque, ¿qué es más fácil, decir: ‘Tus pecados te son perdonados’, o decir: ‘Levántate y anda’?
Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados —entonces dijo al paralítico—:
Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa.
Y él, levantándose, se fue a su casa.”
(Mateo 9:5–7)
Oración por las familias
La oración de la familia no pudo faltar en una reunión de domingo en el Centro de Ayuda Cristiano. El obispo Joaquim y su esposa Tânia, siempre interceden por las familias representadas con oraciones y súplicas por aquellos seres queridos que están enfermos o atravesando momentos difíciles, y en esta ocasión no fue diferente.
No te pierdas el próximo Santo Culto, este domingo a las 10 de la mañana en tu Centro de Ayuda Cristiano más cercano.