El Centro de Ayuda Cristiano, de la mano de su grupo juvenil Fuerza Joven, está llevando a cabo una serie de charlas informativas en centros educativos para dar a conocer los datos recogidos en su II Observatorio de las Bandas Latinas en la Comunidad de Madrid con el fin de evitar que más adolescentes caigan en las redes de estas organizaciones, las cuales han experimentado un gran resurgimiento durante la pandemia.
No han sido pocos los medios de comunicación que se han asomado para ver de cerca el trabajo del Centro de Ayuda Cristiano en materia de prevención y reinserción de pandilleros. Esta vez ha sido Radio Nacional de España y el equipo de su programa vespertino “Por Tres Razones” presentado por Mamen Asencio, los que se han interesado en este proyecto. La emisora ha estado presente en la charla llevada a cabo en el IES Ignacio Ellacuría, en Alcalá de Henares, de la cual se ha sustraído un amplio reportaje que posteriormente sería emitido en el programa del 24 de noviembre.
Arturo Drexter, profesor de religión de este instituto, se ha puesto en contacto con el Centro de Ayuda Cristiano porque “sabía que había chicos que estaban en ese peligro, y de nada sirve enseñarles asignaturas si pierden la vida en una banda”. Razón por la cual adaptó una de sus clases para dar cabida a una charla de prevención para sus alumnos de la E.S.O.
Los expandilleros José y Michael, ambos nombres ficticios, contaron sus respectivas trayectorias en la banda de los Latin King: cómo fueron captados, los rituales de iniciación, las reyertas con bandas contrarias, los miedos más profundos y, finalmente, cómo consiguieron salir.
José, ahora un padre de familia de 35 años, entró hace 21 en los Latin King en un momento bajo de su vida. Se sentía vacío, solo, y la banda se presentó como un grupo de amigos que le prometían diversión. Solo se dio cuenta de que debía estar dispuesto a cualquier cosa, incluso a matar, cuando ya estaba dentro de la estructura. Era demasiado tarde. José vio como mataban a un amigo y vivía con el tormento de que algún día podría tocarle a él. “Empecé a vivir con mucho miedo, porque en cualquier momento iba a ser yo la víctima”, confesaba ante el micrófono.
Michael, llegó más lejos dentro de la misma organización. En su amplio currículum delictivo se suman 10 años de crímenes por los que tuvo que pagar en cinco prisiones diferentes. En la charla de sensibilización se dirigía a los adolescentes para advertirles de los peligros de las bandas. “Yo llevaba un chapter de 34 chicos como ustedes, cuanto más jóvenes mejor, de 13-14 años”. Michael reconoció que intentaba captar a menores para inculparles de los delitos porque ellos no tendrían que ir a prisión.
Los dos hicieron hincapié en el tormento interior que sufrían estando dentro de la banda. “Para dormir, tenía que consumir una bolsa de marihuana, para poder caer KO, y las pocas horas que dormía era con pesadillas por todo lo que ya hice, por la sangre, los muertos, apuñalados que ya vi…y claro, ¿qué paz vas a tener con eso?”, contaba Michael a los adolescentes, que escuchaban absortos su narración.
Ambos pudieron verse libres de la banda cuando buscaron ayuda en el grupo juvenil del Centro de Ayuda Cristiano, el Fuerza Joven. Allí encontraron el apoyo que necesitaban por parte de pastores como Alberto Díaz, actualmente encargado de la reinserción de varios pandilleros.
Los alumnos del Ignacio Ellacuría también han tenido la oportunidad de hacer preguntas y han agradecido el poder aprender, por medio de los testimonios y la información ofrecida que, “MEJOR QUE SALIR DE UNA BANDA, ES NO ENTRAR”.
El Centro de Ayuda Cristiano ha creado una página web dedicada a este programa de reinserción, www.bandaslatinas.com a la completa disposición de profesores, padres, jóvenes y todos los interesados, donde se pueden leer testimonios de expandilleros y noticias de prensa, programar una charla o acceder al documento íntegro del II Observatorio de Bandas Latinas en la Comunidad de Madrid.
