NO SE ASUSTE CON LAS PERSECUCIONES
Los nacidos de Dios poseen el Espíritu de Dios. Los hijos del mundo odian a los hijos de Dios, porque están poseídos por el espíritu del mundo. Por lo tanto, cuando fuese perseguido e injuriado por causa de su fe, manténgase aún más firme en ella.
“Bienaventurados seréis cuando os insulten y persigan, y digan todo género de mal contra vosotros falsamente, por causa de Mí. Regocijaos y alegraos, porque vuestra recompensa en los cielos es grande…” (Mateo 5:11,12).