El Día de la Profecía, celebrado el pasado 10 de septiembre en todas las iglesias del Centro de Ayuda Cristiano, reunió a miles de personas que querían ver el cumplimiento de la Palabra de Dios.
En Madrid, la reunión empezó con varias oraciones decretando la salud, la restauración familiar, la cura del alma y la bendición económica de los que estaban allí. Como resultado a estas oraciones, y por la fe, lo que estaba muerto pasó a tener vida; donde había enfermedad, pasó a haber salud; donde había vicios, pasó a haber liberación y, donde había peleas, pasó a reinar la paz.
Además, el obispo hizo una reflexión bíblica, sencilla pero profunda, para abrir los ojos de los sinceros y hacerles ver la importancia de entregarse en los brazos del Señor Jesús. “Estar en la iglesia no es sinónimo de estar en los brazos de Jesús. Usted tiene que decidir entregarse”, enseñaba el obispo.
En la reunión también se buscó la presencia de Dios con fervor, se regalaron Biblias a los que acudían por primera vez y se hizo una invitación a bautizarse en las aguas.
Todos los domingos, a partir del 17 de septiembre, se harán oraciones en el Arca de la Salvación para determinar la protección y la salvación de la familia. Un propósito inspirado en la conocida historia de Noé, que construyó un arca para que sus familiares fueran salvos de la destrucción que vendría sobre toda la tierra.
