«Si el Señor no edificare la casa, en vano trabajan; si el Señor no guardare la ciudad, en vano vela la guardia. Por demás es que os levantéis de madrugada, y vayáis tarde a reposar, y que comáis pan de dolores; pues a que a su amado dará Dios mientras duerme.» Salmo 127:1-2

Un domingo para sanar las heridas del alma
Las heridas que más duelen y que más hacen sufrir a las personas son las que se producen en el alma. No son físicas. No