Son muchos los estudios que constatan el potencial anticancerígeno de la familia de los vegetales crucíferos, gracias a su alto contenido de glucosinatos. Las personas que integran alguna de sus variantes, son menos propensos a desarrollar diferentes tipos de cáncer.
Cada año en España se diagnostican 228.000 nuevos casos y se contabilizan más de 100 mil muertes al año atribuidas a esta enfermedad. La doctora Pérez, en una de sus intervenciones en el programa “Entre Nosotros” de VIDA FM, aseguró que hay varios tipos de cáncer que se pueden evitar (o al menos minimizar las probabilidades de sufrirlo) si se cambia el estilo de vida y, sobre todo, si se lleva una alimentación saludable.
El primer estudio que relevó las extraordinarias cualidades de las verduras crucíferas data de 1978. Estudios posteriores asociaron los índices de cáncer más bajos con un mayor consumo de este tipo de verduras, que reciben su nombre por la forma en cruz de sus hojas. Sus propiedades han estado documentadas de manera tan contundente que el Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos y la Sociedad Americana de Cáncer recomiendan consumir al menos una ración de crucíferas al día.
Estas son las variantes que pertenecen a la familia de las crucíferas:
- La col o repollo
- El brócoli
- La coliflor
- La col lombarda
- La col rizada o kale
- Las coles de Bruselas
- El rábano
- El nabo
- La rúcula
Para aprovechar al máximo sus propiedades, la doctora sugiere no cocerlas demasiado, siendo el tiempo perfecto 1 minuto en agua hirviendo, y 5 minutos en la cocción al vapor. Aquí también puedes aprender a cocinar alguna de estas verduras. ¡Disfruta de este alimento sabroso y versátil y mantente lejos de las enfermedades!